Robert Kubica dice que no está seguro de cuál será su próximo paso en el mundo del automovilismo.
El polaco hizo un sensacional regreso a la Fórmula 1 después de ocho años de lesiones graves para 2019, pero perdió su asiento en Williams al final de la temporada.
Para 2020, asumió un papel como reserva oficial de Alfa Romeo, combinándolo con un asiento de tiempo completo en el campeonato alemán de turismos DTM.
Pero el jugador de 35 años también ha tenido problemas en el DTM, a pesar de que terminó su sequía de podio en Zolder el fin de semana pasado.
Cuando se le preguntó cómo se perfilan sus perspectivas para 2021, Kubica dijo: “Esa es una pregunta difícil.
“El DTM está cambiando un poco su ADN, pero todavía ofrece un alto nivel de carreras y espero que siga siendo así. Por mí mismo, tengo que ver qué es posible y qué me gustaría hacer.
“Tenemos que esperar, porque Corona ha retrasado un poco todo y todavía necesitamos algo de tiempo para tomar nuestra decisión”, agregó.
A Kubica también se le pidió que comparara la Fórmula 1 a la que regresó el año pasado y la que dejó a finales de 2010, cuando pocos meses después sufrió lesiones permanentes en un accidente de rally de terror.
“El mayor cambio fue probablemente la diferencia de enfoque entre la clasificación y la carrera”, dijo a la publicación holandesa Formule 1.
“En el pasado, esa diferencia no era tan grande. Podías empujar. El auto era 130 kilos más liviano, con mucho menos combustible a bordo en lugar de tener combustible para toda la carrera como ahora. Esa diferencia es enorme”, dijo.
“Ahora, disminuir la velocidad es a veces la forma más rápida de llegar a la meta, por paradójico que parezca”, agregó Kubica. “Ahora se trata de controlarte más, lo cual no es natural.
“En las otras clases hay que sacarle el máximo partido, pero en la Fórmula 1 a veces hay que hacer menos para conseguir un buen resultado”.