Arranca una nueva temporada de F1 y llega con muchos cambios en las alineaciones de pilotos. Fernando Alonso regresa con Alpine, Checo Pérez ficha por Red Bull, Sebastian Vettel abandona Ferrari para ir a Aston Martin, Carlos Sainz deja McLaren para fichar por Maranello y Daniel Ricciardo recala en Woking. Estos cambios provocarán inevitablemente que los pilotos deban encontrar su espacio dentro de los equipos, definir quien es el piloto líder.
Y no es algo sencillo, los pilotos que llegan a la F1 lo hacen tras años de victorias en otras categorías, todos quieren ser al macho alfa. Miremos por un instante a Mercedes, tras algunos años, está claro que el piloto líder es Lewis Hamilton, tiene siete campeonatos del mundo con 95 victorias en la máxima categoría. Pero está claro porque su compañero sigue siendo Valtteri Bottas, si la escudería alemana hubiese fichado a otro piloto, no habría tenido contemplaciones en pista con el heptacampeón.
Eso es lo que ocurrirá en McLaren, Alpine, Aston Martin, Red Bull y Ferrari. Al menos en las primeras carreras, uno de los dos pilotos se mostrará por encima del otro, o bien el equipo decidirá quien es el líder y a quien debe beneficiar si se tercia la ocasión.
Y, repito, los títulos de campeón del mundo pueden significar bien poco, o nada, una vez en el fragor de la batalla. Todos tenemos en mente lo que ocurrió entre Sebastian Vettel y Charles Leclerc, con dos puntos álgidos en esa lucha, uno en Brasil 2019 y otro en Estiria 2020. Aviso a navegantes para Carlos.
Pero año nuevo, vida nueva, como diría el refrán. Leclerc quiere que la temporada 2021 transcurra de otro modo: “Tenemos que encontrar el compromiso adecuado. Tiene sentido que queramos ganar al otro, pero tendremos mucho cuidado cuando peleemos entre nosotros. No olvidaremos que el equipo es lo primero”.
El monegasco cree que lo importante es separar lo que sucede dentro y fuera de la pista, las luchas en pista deben dejar paso a un trabajo conjunto cuando no estén subidos en el Ferrari SF21 para potenciar el desarrollo del coche.
También Carlos Sainz tiene claro que lo prioritario es trabajar por el bien común del equipo, al menos en los primeros compases. Por supuesto tiene claro que la comparativa de rendimiento con el resto de pilotos empieza por tu compañero de equipo, es tu principal rival, lleva el mismo coche que tú y cuenta con información privilegiada de la telemetría.
“Siempre ocurre en la F1 que tu compañero de equipo es tu primer criterio , por supuesto, quieres estar un paso por delante”, dijo el piloto madrileño. “Pero para mí, el equipo sigue siendo lo prioritario. Creo que hemos tenido un buen comienzo juntos, pasamos mucho tiempo en la fábrica en enero y febrero”.
Por su parte el director deportivo Laurent Mekies dijo durante la presentación del nuevo Ferrari SF21 que ve a dos pilotos trabajando en equipo, como si fuesen compañeros que han trabajado bien durante mucho tiempo. Espera mucho de la nueva alineación de F1 de Maranello para esta temporada y quiere ver un nuevo resurgir de Ferrari en 2021.
“Se puede percibir [ese buen ambiente de trabajo entre pilotos] en las reuniones tras trabajar en el simulador. La comunicación entre ellos y los técnicos es ejemplar. Puedo decir que disfrutan trabajando juntos. Y eso es fundamental, no se trata sólo de lo que dices sobre el coche, se trata de la energía que emana de ti y se irradia a todo el equipo”, añadió Makies.
Tras su paso por McLaren ha quedado demostrado que Carlos es un gran jugador de equipo, primero hacer crecer al equipo para tener un arma con la que luchar. Luego ya llegarán los triunfos y la lucha entre compañeros, pero el objetivo está claro, Sainz quiere ser campeón del mundo en los próximos cinco años y para eso debe tener el mejor coche. Eso no es fruto de la suerte, detrás hay mucho trabajo previo.