Max Verstappen ha defendido a los comisarios de la F1 cuando finalmente finaliza el caso de penalización de Sebastian Vettel.
El viernes en Paul Ricard, la FIA rechazó el impulso de Ferrari por una revisión de la controversial llamada que le costó a Vettel la victoria en Canadá.
El equipo de Maranello declaró que tenía “abrumadora” nueva evidencia para presentar, incluyendo imágenes de análisis de TV realizadas por el experto británico y el ex piloto de F1 Karun Chandhok.
Pero después de una audiencia de 30 minutos, la FIA declaró que no había “ninguna evidencia significativa o relevante” para considerar.
La jefa del equipo Ferrari, Mattia Binotto, dijo que el equipo está “muy descontento” con la decisión, pero declaró el asunto cerrado. “No tengo la intención de hacer más comentarios”, dijo a Paul Ricard.
Vettel bromeó con frustración porque la única forma de evitar más decisiones “injustas” en el futuro es “retirarse”.
“Hay demasiados párrafos en el libro de reglas. ¿Cómo puedes cambiarlo? Solo quema los papeles”, dijo el alemán.
Luego, los comisarios recibieron más críticas el viernes, cuando Lewis Hamilton regresó a la pista frente a Max Verstappen, pero no fue penalizado.
“Estoy en contra de tales castigos, pero si los comisarios quieren ser constantes, Hamilton no debería salirse con la suya”, dijo el Dr. Helmut Marko de Red Bull.
Pero Verstappen, quien sirvió en el servicio comunitario con administradores de la FIA después de su altercado el año pasado con Esteban Ocon, defendió a los funcionarios.
“Leí que fueron criticados en las redes sociales y no creo que eso sea justo”, dijo el holandés.
“Los comisarios a menudo entienden exactamente lo que sucedió. No quieren castigar, pero tienen que hacerlo porque está en las reglas. Sólo están aplicando las reglas”.