El equipo F3 que le dio a Max Verstappen su trampolín hacia la Fórmula 1 tiene problemas financieros.
Si bien muchos están preocupados por el destino de los equipos de Fórmula 1, Fritz Van Amersfoort advierte que los equipos de carreras junior como el suyo están, si cabe, en mayor peligro.
“En las clases junior, los equipos dependen principalmente del dinero que traen los pilotos”, dijo a RTL.
“Y obviamente no puedo exigir que cumplan con los términos de sus contratos si no estamos compitiendo”.
“Recibimos algunos pagos por adelantado y ahora contamos con este dinero. Tenemos 35 empleados a tiempo completo y todos necesitan un salario”.
“La pregunta es cuánto tiempo podemos resistir, pero todo esto no puede continuar durante seis meses”, agregó Van Amersfoort.
“No estoy familiarizado con las finanzas en la Fórmula 1, pero el problema con un equipo de nuestro nivel es que dependemos completamente del efectivo. No tenemos ahorros”.
“Sí, en este momento ahorramos en no ir a las carreras o pagar habitaciones de hotel, pero el punto es que solo podemos pagar cuando los pilotos nos pagan”.