Sebastian Vettel admitió haber empujado físicamente a un intruso oficial en el podio del GP de México el domingo pasado.
La Fórmula 1 animó la acción del podio en México, elevó a Lewis Hamilton y su Mercedes en un elevador e invitó a un personaje similar a Stig a tomar 'selfies' con los pilotos celebrando.
“Fue agradable tener un auto en el podio, incluso si no funciona en todas partes. Fue bueno, excepto por el tipo con el palo de selfie”, dijo Vettel de Ferrari al periódico Bild.
“Por eso lo alejé”.
Siempre purista de la F1, el alemán también cerró los trofeos del GP de México.
“Tenemos una buena carrera, y luego obtienes estos trofeos aburridos”, dijo Vettel.
“Tal vez deberíamos obtener algo más tradicional en el futuro. Heineken ya está en todas partes, ¿realmente necesitamos su logotipo como el trofeo también?”
Tiene razón, soportar al tipo sacando la selfie y encima que el trofeo tenga publidad, es mucho.