Lewis Hamilton, después de que se quejase en Silverstone de que tenía una agenda demasiado ocupada fuera de la pista, ha logrado que sus reivindicaciones sean escuchadas por su equipo y le han dado unos días de descanso en su casa.
El Gran Premio de Británico ha supuesto para Hamilton una multitud de actos entre comparecencias ante los medios de comunicación y los actos promocionales con los patrocinadores, por lo que el piloto británico había advertido a McLaren que “se iban a sorprender” al escuchar sus reivindicaciones para el nuevo contrato en 2012.
“No voy a hacer tantos actos. Definitivamente hay un peligro de que termine ‘quemado'”, dijo el campeón del mundo de 2008, que se negó ha hacer esta semana dos días de los actos programados.
“Se suponía que debería estar trabajando hoy mañana, pero dijo que de ninguna forma porque he estado en Inglaterra durante la última semana y he estado muy ocupado aquí”, reveló Hamilton el lunes. “Es genial volver a casa, poner los pies en alto y ver la tele”.
El jefe del equipo, Martin Whitmarsh, admite que Hamilton se siente sobrecargado de trabajo por la cantidad de cosas que hacer fuera de la pista: “Creo que Lewis ha hecho demasiadas cosas en este gran premio”.
“Hemos logrado organizar un poco el descanso de Lewis antes de Alemania, que sé que es lo que quiere”, añadió Whitmarsh, quien dijo que los pilotos de F1 también tiene “una gran oportunidad” de descansar durante el cierre de la fábrica en agosto.
“Se suponía que debía estar volando a la India el miércoles, para una visita rápida. Afortunadamente, por alguna razón, fue cancelado”, explicó Hamilton. “Eso es bueno”.