El heptacampeón Michael Schumacher sigue sin sacar el rendimiento esperado a su monoplaza, cuando no es un fallo mecánico o un error en los boxes, es un fallo en clasificación que le obliga, como en esta carrera a salir en el fondo de la parrilla, que se agrava por la penalización al cambiar la caja de cambios, el caso es que hasta ahora no ha tenido una carrera limpia.
“Teniendo en cuenta donde empecé la carrera de hoy, es positivo que fuese capaz de luchar hasta la décima posición, sumar un punto y terminar una carrera en seco esta temporada”, dijo el heptacampeón.
“Los neumáticos, obviamente, jugaron un papel importante en la carrera de hoy, y en las condiciones de aquí, hemos tenido que adaptar el estilo de pilotaje para mantener los neumáticos lo máximo posible. Será bueno tener tiempo antes de Barcelona para solucionar algunas cuestiones y preparar nuestras actualizaciones para los días de pruebas en Mugello”.
“El próximo fin de semana comienza el DTM en Hockenheim y estoy con ganas de hacer mi primera visita a una carrera del campeonato alemán de turismo en veinte años”, añadió Schumacher.
Realmente sería bueno que Michael tuviese una carrera sin incidentes, ya hemos visto que el coche tiene el nivel para competir, que han solucionado los problemas de degradación de gomas, ahora solo falta que no cometan más errores de estrategia y que los fallos mecánicos le dejen tener una carrera donde puede demostrar su potencial.
Que Schumacher no es el jovenzuelo que llegó a Ferrari lo tenemos todos claro, pero a sus 43 años creo que todavía puede enseñar algunas cosas a estos chavales a los que dobla en edad en algunos casos. Es siete veces campeón del mundo, no tiene nada que demostrar, pero los aficionados si que queremos ver de que es capaz todavía en la pista.