Lewis Hamilton es consciente de lo complicado que va a ser su cambio de equipo para la próxima temporada, está claro que el coche de Mercedes en estos tres años no ha estado nunca a la altura de lo que se esperaba, para el piloto británico la próxima temporada puede suponer un vagar por el desierto.
“Absolutamente no”, dijo a los periodistas el campeón de 2008 en Japón cuando se le preguntó por una hipotética lucha por el campeonato de 2013, cuando dejará su actual equipo para ocupar el sitio de Schumacher en Mercedes. “Ni siguiera espero ganar carreras”.
Hamilton afirmó que el proyecto de Mercedes es un planteamiento a largo plazo, lo que puede significar una sequía de victorias en su carrera durante algún tiempo.
“Esa es una de las cosas que me tenía que sacar de la cabeza cuando estaba considerando la posibilidad de fichar por Mercedes. Es en 2014 o 2015 cuando estimo que podríamos tener más éxito”, dijo el británico, a quien este fin de semana no le han ido bien las cosas en Suzuka por culpa de un mal reglaje.
Eso ha levantado todo tipo de suspicacias ante su inminente salida del equipo en cinco carreras, en buena parte ya está siendo apartado del equipo, todo lo que hace referencia al proyecto de 2013 es top secret en Woking para él.
Su todavía jefe de filas Martin Whitmarsh restó importancia a los temores vaya a recopilar información para llevarse a Mercedes, pero su compañero Jenson Button reveló que Hamilton está siendo apartado de las reuniones sobre el proyecto de 2013.
“Lo que Lewis ha visto (hasta ahora) no es una preocupación”, dijo Button. “Este año compartiremos todo lo relacionado con el coche, pero si hay una reunión sobre el coche del año que viene, entonces no”.
Y McLaren está haciendo valer el contrato que ata a Hamilton hasta final de año rechazando el permiso del piloto para acercarse a la fábrica de Mercedes en Brackley, como confirmó el piloto. Este es el inicio del deterioro de la relación entre Hamilton y McLaren.